ARGENTINA SEX

Como en las grandes capitales del mundo, Buenos Aires también cuenta con Drags que, desde los 80’s, son anfitrionas de los grandes circuitos de entretenimiento para todos los géneros. Ahora, Buenos Aires elige a su propia Drag Queen.

Con una estética propia y diversidad creativa en una noche prometedora, gala tras gala se verá el glamour y la impronta única de estas aspirantes a conquistar el trono.

“Concursantes de todos los puntos de la Capital y el Gran Buenos Aires ya están anotados en este certamen que coronará el talento, la creatividad y el proceso que recorrerán en un camino que dará como resultado un show distinto a todo lo conocido” afirman desde DeMos!, los organizadores del cast.

Lxs participantes no solo contarán con su propio proyecto creativo, sino que durante todo el certamen estarán acompañadxs por profesionales de las distintas ramas desde su estética personal, pasando por la puesta en escena, coreografía, actuación y todo lo que involucre el trabajo en cada performance.

El evento tendrá lugar a partir del 18 de julio en Bip Zonda (Zona Oeste, Ramos Mejia), donde el publico será el principal testigo cuando Buenos Aires encuentre a su Drag Queen 2009.

ARTE DRAG QUEEN

Reinona o Drag Queen es una persona que se viste y actúa exageradamente como una mujer de forma provocativa, exaltando lo cómico, dramático o satírico. Es una forma de transformismo con fines primordialmente actorales o de entretenimiento en espectáculos públicos. Hay un importante número de hombres heterosexuales que son drag queen, como también muchxs transexuales y gays.

Divine fue la primera de todas, después llegó RuPaul y hasta la fecha numerosos varones deciden disfrazarse con lentejuelas y tacones de vértigo para convertirse en los protagonistas de la juerga nocturna. El movimiento drag comenzó en España allá en los ochenta y hoy, amadrinados por la cantante Alaska se encuentra con mayor fuerza y protagonismo que jamás pudieron pensar.

Cubiertas de púrpurina, envueltas por sedas y túnicas que en muchos casos recuerdan a las películas futuristas, separadas de la tierra por decenas de centímetros que poseen sus tacones y con el objetivo de escandalizar, de desafiar, de dar espectáculo.